Escribo esta reseña recién aterrizado de un gran puente del Pilar en Grazalema y el Parque Natural
que le rodea. Casi todos sabéis de las maravillas que aguardan al inquieto visitante - turista - viajero cuando entra en esta, nuestra pequeña pero variadísima provincia meridional, con una composición social, paisajística, cultural y (por tanto) gastronómica, digna de mención.
Si os acercáis lo suficiente al mapa, huele a Payoyo... |
Y ahí está el por qué de esta entrada. Hemos pasado un finde largo en la Sierra de Cádiz y hemos engordado, cuantitativa y cualitativamente como no está en los escritos. Y os lo vamos a contar.
La Sierra de Cádiz es una de las comarcas en las que está dividida la provincia, localizandose en la parte nor-oriental de la misma. Coincide en gran medida con los límites del Parque Natural Sierra de Grazalema (éste incluye a Montejaque y Benaoján, en Málaga) que fué el primero en ser declarado como tal en Andalucía. Quiero aplaudir a la persona/s responsables de esa distinción tan merecidisima.
Maravillas naturales como el puerto del Boyar, el Pinsapar, el embalse de Zahara-Gastor, los llanos de Libar, el Torreón, la cueva del gato, la garganta verde, o el salto del cabrero están directamente relacionados con los manjares que este Parque y sus gentes producen Y NOS IMPORTA que se mantengan en perfectas condiciones.
Comencemos con lo importante, día 1: El sábado morning llegamos a El Bosque cargados de ganas de iniciar este apasionante puente. El primer destino de este viaje no es accesorio, pues durante el finde se celebraba en esta localidad la Feria Gastronomica ``La Despensa de Recuerdos´´ que organizaban (entre otras muchas insituciones con logo) Diputación de Cádiz y Ayto de El Bosque. Aquí os paso una pequeña crónica hecha con mucho amor por parte de el diario El Baluarte, de Cádiz http://www.elbaluartedecadiz.es/2014/10/la-feria-gastronomica-de-el-bosque-rompe-las-previsiones-ante-la-calurosa-acogida-del-publico/
La culpable de nuestro placer |
Pues bien, resultó ser un compendio bastante interesante de los diferentes productos con origen en esta comarca gaditana. Allí estaba la creme de la creme de la coloración, y terminamos comprando sin remedio algunas cositas, entre ellas quesos de Ubrique, mermeladas de Zahara o vino dulce de Prado. Era imposible resistirse a la amabiliadad y las muestras colocadas con cariño y fina estrategia por los productores de los manjares.
Continuamos la ruta para puerto del Boyar en dirección a Grazalema parando en Benamahoma, pedanía de ésta. Benamahoma es famoso entre muchas cosas por el senderismo (desde aqui parte la ruta del Pinsapar a la sombra del Torreón), las fiestas de moros y cristianos (los sabados ganan los moros, los domingos los cristianos para que ``no llegue a mayores´´) y también, a partir de hoy, por los buñuelos con chocolate los findes de otoño-invierno a partir de las 17hrs. Las responsables de mantener esta maravillosa tradición son las señoras de la Asociación Las Huertas de Benamahoma, que se cogen sus peroles y dan de comer unos deliciosos buñuelos a todo aquel que pase por la plaza del pueblo.
Personas mayores de Grazalema. Ellos si que se saben afortunados |
Grazalema tiene algo que los demás desearían: allí se crearon los cubiletes. Estos dulces de forma cónica te encantarán. Guardan similitud con algunas recetas de mantecados, pero tienen algo que les hace diferentes, puede que su relleno, su forma o el lugar en el que los adquieres / degustas.
De su receta no os vamos a hablar aquí. Para eso está Diego Martinez de Salas, cronista digital de este pueblo, que nos ilustra maravillosamente sobre el origen y los ingredientes de este dulce: http://raicesdegrazalema.wordpress.com/2014/01/28/cubiletes-de-grazalema/
Grazalema tiene otros platos de cuchara y lugares de buen yantar que visitar, pero eso son otros cantares, que no vamos a contarlo todo en una entrada...
Día 2. Proseguimos nuestro camino conociendo el Parque Natural y sus pueblos, y nos dirigimos (paso por el Puerto de Las Palomas mediante) a Zahara de la Sierra, uno de los pueblos mas pintorescos de esta tierra, otrora de frontera entre Castilla y las taifas moras. Allí, además de admirar el maravilloso castillo de origen àrabe, nos paramos a almorzar no en un lugar cualquiera, si no en el bar que más lleno encontramos (tipico criterio sin personalidad, pero completamente efectivo - al igual que cuando paramos en la tipica venta de carretera llena de camiones-).
Precioso momento de luz y sombra, camino de Zahara |
Proseguimos nuestro camino en busca del manjar perdido, volviendo sobre nuestros pasos, pero en esta ocasión haciendolo por la Ribera de Gaidovar, un precioso enclave entre El Gastor y Grazalema, con una carretera serpenteante como bella, llena de paredes caliza y pequeñas fincas ganaderas separadas por muretes de piedra, muy ``norteño´´.
A nuestra vuelta a Grazalema, pasamos por una de sus confiterías de referencia, la situada en la Avda Alcalde Vazquez Domar (investigaremos en busca del nombre). Allí os recomendamos que os permitáis pecar por exceso, y probéis el ``camión´´... sobran las las palabras.
Día 3. Aquí llega la ``manteca colorá´´ de este viaje de placer. Nos dirijimos a Villaluenga del Rosario, siguiendo el perfecto rastro olfativo que captabamos durante los 13,4Kms que separan estas villas serranas. Mencion aparte merece el espectacular paisaje calcareo que nos recibe en el valle, y la belleza arquitectonica de este pequeño poblado quesero de Villaluenga. En el pueblo mas alto y menos poblado de Cadiz podéis encontrar mucho, pero todo (gastronomicamente hablando) gira en torno a esto...
Difícil concentrar mas sabor, mas aroma, mas autenticidad, mas campo y mas Sierra de Cadiz en un bocado que en este. El queso de cabra Payoya, de cualquiera de sus productores y en cualquiera de sus formas de curación (semi / curado / con pimentón, manteca o al romero), te asegura un rato excepcional, con un regustito inconfundible en el cielo de la boca después del bocado. Estamos hablando de uno de los curados con mayor reconocimiento a nivel internacional (cuentan con varias medallas que reconocen su excelencia).
Excelente ejecución: revuelto morcilla con patatas |
Allí, pusimos punto y final con una gran degustación. Comenzamos con un revuelto de morcilla con patatas casero, casero y sin trampas: un huevo sensacionalmente cuajado con su morcilla de cebolla de categoría son suficientes para arrancar una sonrisa en el entrante. Continuamos con unas chuletitas de cordero muy correctas y dejamos para el final los dos platos estrella de nuestro menú en Las Vegas:
Un plato de venao con un sabor descomunal (ojo, preguntad y si no está congelado, pedidlo a la plancha) y un jabalí al horno que os quitarán el sentío cuando visitéis este rincon perdido de la Sierra de Cadiz. Nuestra valoración en conjunto de Las Vegas dentro de la categoría de Tabernas es de 4 Chanquetes, por la combinación de buenas carnes de caza, servicio, vistas y precios competitivos.
La preciosa panorámica desde el salón de Las Vegas (Benaocaz)
Ha sido un placer visitarte y comer tus manjares, Parque de Grazalema. Nos vemos pronto ¡¡¡
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